domingo, 19 de agosto de 2018

Retratos

De vez en cuando hay que tener experiencias diferentes para enriquecerse. Hacer siempre lo mismo es como comer siempre lo mismo: puede estar muy bueno pero acabarás odiándolo. Esta vez les presento una serie de retratos que tuve la oportunidad de hacer en enero del 2016, bajo las expertas recomendaciones de José Benito Ruiz y gracias a la amable colaboración de los modelos, muchos de ellos fotógrafos profesionales. No puedo menos que agradecerles su generosidad en posar para nosotros haciendo renuncia de obtener sus propias imágenes.

Espero que les gusten las fotos compartidas.

















miércoles, 1 de agosto de 2018

El pájaro loco

El pico picapinos (Dendrocopos major) es otra de las especies características del pinar canario, si bien ocupa otras formaciones vegetales, incluidas las de su amplia área distribución por el Paleártico. Sus adaptaciones son realmente sorprendente a la vida que lleva "trepando" por los troncos verticales de estos árboles. Para empezar tiene dos dedos de sus patas hacia adelante y dos para atrás, al objeto de agarrarse mejor a las cortezas. De otra parte su cola le sirve de apoyo al animal al objeto de vencer la gravedad. He observado a estos animales dormir en vertical durante más de media hora sin aparente esfuerzo.

Otra adaptación importante es el fuerte pico que le permite agujerear la madera de los árboles sin que se fracture ni astille. Le acompaña la larga y pegajosa lengua, que introduce en los agujeros practicados en la madera para extraer las orugas e insectos de los que se alimenta. Pero sin duda, lo más extraordinario de este animal es el hueso poroso que tiene en la parte anterior de sus cerebro (en la base del pico), que lo pone a salvo de los posibles daños por los impactos contra los troncos.

Separar los sexos y juveniles es muy sencillo: mientras que los machos tienen la nuca teñida de rojo, los juveniles tienen el píleo de este color (el "techo" de la cabeza) y las hembras carecen de esta mancha.

En Canarias hay dos subespecies propias: canariensis de Gran Canaria y numidus de Tenerife. Las fotos que aquí se presentan es de la subespecie canariensis.

Durante tiempo estuvo perseguido por el sector forestal pensando que dañaba a los árboles; desde hace muchos años está plenamente demostrado y aceptado que cumple un papel ecológico muy interesante en las bosques dado que contribuye a sanear las masas vegetales mediante una activa busca de invertebrados xilófagos.

Finalmente, es muy característico su tamborileo en el paisaje sonoro del bosque y no menos sus contrastados colores mientras lo atraviesa con un vuelo ondulante.
















lunes, 23 de julio de 2018

La joya azul

El pinzón azul de Gran Canaria tiene varias particularidades. La primera y más obvia es que pocas especies de aves tienen su color azul. La segunda es que resulta ser una de las aves más escasas del Planeta, con apenas 400 parejas reproductoras (*). La tercera, estamos ante una especie endémica de la isla de Gran Canaria. La cuarta, es que a pesar de ser un vertebrado muy estudiado, no alcanzó su estatus como especie propia hasta hace apenas dos años. Y finalmente, la quinta, es que estamos ante una especie muy acomodaticia a la presencia humana pero, en mi opinión, las poblaciones que no comparten hábitat con los humanos son relativamente recelosas.

Su hábitat potencial son los pinares de la isla, especialmente aquellas formaciones maduras que tienen un sotobosque rico en especies vegetales, lo cual le proporciona recursos alimentarios durante todo el año pero especialmente durante la época de cría.

Las fotos que les presento fueron tomadas en apoyo al proyecto Life que actualmente lidera el Cabildo de Gran Canaria con la colaboración de la Unión Europea y diversos socios. Fueron dos días y medio de plena dedicación, con nueve horas diarias de espera repartida en una sesión matutina y otra vespertina. Al final una 25 horas de "espera".

Con esta aportación mejoramos las tomas de entradas anteriores. Por ejemplo, los ejemplares tienen en mejor estado los plumajes y no tinen las coloridas anillas con las cuales los científicos los identifican para hacer su seguimiento.

(*) FE DE ERRATAS: Me dicen los responsebles del proyecto de recuperación que los últimos censos han revelado 317 ejemplares, no 400 parejas.