jueves, 24 de septiembre de 2015

Vendo material usado: Sigma APO 500 mm f/4,5 D EX HSM

Desde hace algún tiempo vengo usando el objetivo Nikon 600 mm f/4 VR IIpara las aves; mientras, el Sigma 500 f/4,5 duerme el sueño de los justos. Es por ello que lo pongo a la venta al precio de 1.900 euros. Hay que tener en cuenta que el precio del objetivo, nuevo, en el lugar que más barato que lo he visto en Canarias es de 4.500 euros y que además hay que pedirlo por encargo, con lo cual se retrasa mucho su disfrute.

El objetivo tiene montura Nikon y es válido para cámaras fullframe (denominadas FX en Nikon), de manera que cuando se monta en una cámara DX se queda como un 750 mm, sin perder luminosidad. Esto, unido a su relativamente ligero peso para un objetivo de estas características (unos 2,5 kilos), su distancia mínima de enfoque (4 metros) y el tener tres rangos de enfoque (y no dos como los Nikon), lo convierten en una magnífica elección.

Como se puede apreciar en las fotos que acompaña esta nota, los cristales están totalmente libres de cualquier daño o burbuja y la montura (de fibra de magnesio), ha estado prácticamente siempre protegida por funda de neopreno de la prestigiosa casa Lens Coat.

Entrego el objetivo con su parasol, funda, correa, tapas y caja original, dado que yo he sido su único propietario y ha sido tratado con sumo esmero. Finalmente decir que no lo cambio por otras cosas y que prefiero entregarlo en mano para que el comprador pueda verificar el estado de conservación y funcionamiento de este magnífico objetivo.


Puedes contactar conmigo a través de mi cuenta Facebook o a través del correo electrónico estevez10@ono.com










martes, 8 de septiembre de 2015

El bebedero de Fagajesto

Si hay algo que atraiga a los pájaros durante el verano es el agua. El agua y cualquier recurso limitante. Y eso es lo que ha ocurrido en un bebedero de Fagajesto, una hermosa localidad al norte de Gran Canaria: los canarios silvestres, pardillos (localmente denominados linaceros), los jilgueros (o pintos) y otras especies más circunstanciales acudían por cientos. Sí, podíamos ver grupos de algunos cientos. Posiblemente la mayoría de la población de muchos kilómetros cuadrados, pues es bien sabido la aminoración de las poblaciones que estas especies están teniendo en los últimos cincuenta años.

Esto, a su vez, provocaba la agregación de hasta dieciséis fotógrafos en un fin de semana, según uno de los asiduos. Yo estuve cuatro veces: en dos llovió y por lo tanto los pájaros no acudieron, en otra me encontré el bebedero seco, y por los tantos las aves se habían trasladado a otro lugar (no apareció ni una) y en una de las sesiones me serví a placer.

Espero retomar la tarea en otro momento. El lugar, especialmente cuando las aves tenga un plumaje más lucido, aunque como ya dije en un entrada anterior a este blog, es conveniente documentar todas las fases de la biología de las especies. También las menos lucidas. Todas las fotos que presento a continuación son de linaceros o pardillos, excepto las dos primeras, de plumaje amarillo, que obviamente son canarios silvestres. Termino la muestra con un paisaje que no me puedo sustraer de presentarles. Tontorrón que se pone uno con estos espectáculos naturales que te brindan las muchas horas en el campo...

Como siempre, haciendo doble click sobre las imágenes podrás verlas más grandes.